9 D'OCTUBRE 2010

Estamos tan lejos de aquellos años reivindicativos, donde teníamos tanta ilusión por la autonomía (Llibertat, Amnistia, Estatut d'automia...) y por establecer una democracia que poco a poco se ha ido consiguiendo. Aunque bien es verdad que las decepciones están a la orden del día, porque actualmente pasan cosas que los más confiados, no pensábamos que pudieran tener lugar en un utópico país democrático, donde todo era transparente y diáfano, donde el pueblo decidía sobre su destino.

Del 9 d'Octubre, en su lugar nos ha quedado una celebración medianamente festiva, una mañana en la que dar una vuelta, salir con la familia o los amigos y disfrutar de nuestra Explanada, sin calor excesivo y eso sí: disfrutando del tabalet y la dolçaina, de nuestros bailes tan queridos, de nuestros nanos i gegants, teniendo la oportunidad de sentirnos niños otra vez de ir detrás de la música y luego ya en el templete (auqnue ahora se empeñen en llamarlo concha), de ver la actuación de nuestros grupos folclóricos más queridos. Lo dicho: una mañana festiva que aunque a veces haga que miremos con nostalgia aquellos tiempos, aquella ilusión por tener un país mejor y el camino tan distinto que ha tenido, pues valga la pena haber estado allí, en nuestro paseo más emblemático.

Momentos previos

Esperando las actuaciones.

Talleres y juegos infantiles

Camioneta mal aparcada.

nanos i gegants

Ballant...

Carros de foc teatre...

Y como colofón musical, una de mis composiciones preferidas "La jota del castellut" , que hay que escuchar con atención para disfrutar de ella.