Cuando uno lee todo lo que hay alrededor de la compra del Rico Pérez por Enrique Ortiz (bajo unas determinadas condiciones que encima no se han cumplido), la posterior intención de hacer un centro comercial, hoteles, viviendas, etc...incluso uniendo sus terrenos con los de Aguas Municipalizadas (y haciendo desaparecer los históricos depósitos de agua del Altozano) y las posteriores maniobras sobre la instalación de Ikea en Rabassa, uno ya no sabe qué decir, tanta y tan grande es la impotencia que se siente ante los tejemanejes que se traen estas personas; Ortiz que es lógico que quiera el mundo para él y por otra el Ayuntamiento que DEBE de trabajar para nosotros y ser totalmente transparente y legal, pero que la impresión es que no, que está manejado por oscuros intereses y que en realidad los 325.000 habitantes de esta ciudad, somos 325.000 ceros a la izquierda, es decir: nada, no contamos para nada, somos unos míseros números que en el mejor de los casos sólo acertamos a cabrearnos (porque a los demás ni les interesa ni quieren saber nada, con la coletilla de: "total, todos son iguales..." ya están salvados). Y sólo nos queda el derecho a la pataleta y por eso pongo esta foto:
Porque a pesar de lo educado que pretende ser uno, al final no puede más y no tiene más remedio que ser grosero y mandar a toda esta gente a donde se merecen: a fer punyetes. A ellos les es igual: al final se saldrán con la suya y los alicantinos, como siempre mal parados y boquiabiertos.
Por cierto. la foto está hecha a un cartel de la foguera de Altozano de este año que a su vez está basado en un cartel propagandístico bélico.
Y como sugerencia de Arturo, el tango Cambalache como acompañamiento musical del post. Eso sí: con una pequeña licencia por mi parte ya que Carlos Gardel no me gusta nada, así que he puesto la versión de Joan Manuel Serrat:
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No se para que se hacen la elecciones municipales y para que votamos, pues desde hace muchos años el que manda, es el de siempre.
ResponderEliminararturo moreno
Como fondo musical pondría ese hermoso tango, "Cambalache"
ResponderEliminararturo
Yo hace tiempo que cambié mi cara de gilipollas por mi cara de tontolculo; ahora vivo en una utopía propia de las tecnicas de curación tibetanas.
ResponderEliminarEn otras palabras, Kiko...¡llega un extremo que "melasuda" todo, incluido el puto Plan Rabassa y el Ikea!
Yo seguiré a lo mío, que es hacer artículos culturales e historicos que no le interesan un pijo a nadie.
¡Asco de ciudad!
Pues es que al final te hacen volverte así: menfotiste total. De todas formas, la sra de la imagen tiene un doble sentido: en realidad no está haciendo un corte de mangas, sino demostando que es igual de fuerte que el hombre (me refiero al cartel en sí, no a lo relacionado con este post) y por otra parte, se puede interpretar como que lo está haciendo (el sentido que le dieron en la foguera). Así que cualquiera de los dos se puede coger: o bien nos rebelamos o los mandamos a Sebastopol. O ambos.
ResponderEliminarQuizá la solución sea quitarle poder a los ayuntamientos porque visto lo visto..
ResponderEliminarChé, Enrique Ortiz estaría de acuerdo con el anterior comentario...
ResponderEliminarPues no creo que sea la solución. La solución es que el Ayuntamiento cumpla con la legalidad y vele por el interés de todos, no de unos pocos y sino es así, pues para eso tenemos que estar todos los administrados: para evitarlo. Y no estoy hablando de rebeliones violentas ni nada de eso, pero cuando el pueblo se remueve, al final por mucho poder que tenga el político, al final hacen caso. Y jaconca: claro, supongo que te referirás a que se lo quiten al Ayuntamiento y se lo den a él, ¿no?. Bueno, no sé, prácticamente lo tiene ya...
ResponderEliminarPaco, 100% d'acord.
ResponderEliminarSi un pleno de un ayuntamiento, compuesto por.. unas pocas personas, tiene poder de decisión sobre temas en los que estan en juego millones de euros.. pues eso, que al final la codicia hace que el enrique ortiz de turno les unta un poquito y se convierte en el puto amo
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