EL "PEELING" DE LA CASA DE LA VILLAVIEJA

Pues sí, hoy voy de moderno, pero para quien no lo sepa, "peeling" es la manera de decir en inglés exfoliación, es decir: "la descamación natural o inducida por medio de activos exfoliantes que se produce en la epidermis con el fin de limpiarla de células muertas, toxinas, etc. y prepararla para recibir principios activos que la hidraten y nutran. Naturalmente se trata de la piel, pero podemos extrapolar el asunto a la fachada de esta casa de la C/Villavieja 17 y Luzán. En el caso del edificio, no sé si tendría algún problema de desprendimientos con el revestimiento, que han decidido quitárselo. La verdad es que bonito no era. A simple vista se notaba que había habido una intervención bastante traumática, supongo que en los años 60, con alteración de huecos, añadiendo persianas empotradas, jardineras, eliminación del revoco original y el aplicado de un falso enlucido con cuarterones. El caso es que hace pocos días han seguido el primer paso del tratamiento: eliminar todo el revestimiento exterior, las jardineras y hasta el resto de los recercados originales que quedaban, pero han dejado a  la vista la piedra de la mampostería que no está pensada para dejarla así, sino recubierta, con otro resultado estético final. Pero bueno, como siempre digo en estos casos, mejor ésto que derribar ¿no?

Estado anterior de las fachadas. 

Como veis en las dos últimas fotos se estaba urbanizando la calle Luzán (luego se actuó también sobre Villavieja y las demás travesías). Aunque teóricamente se dejaron canalizaciones subterráneas para deshacerse de los antiestéticos cables que enmarañan toda la calle, actualmente siguen ahí, "adornando" el paisaje.

Andamio cesta durante las obras. Foto extraída del Diario Información

Estado final de las fachadas.

En la Calle Villavieja hay unas cuantas fachadas dignas de ser catalogadas, pero el redactor del PGOU solo accedió a hacerlo con la nº 15 (la que comparte la entrada a la C/Luzán con la que hoy nos ocupa), a pesar de que las otras conservan casi en su totalidad su aspecto original.

Y para poner música a la entrada, pues recurrimos a Mecano y su Maquillaje donde la prota de la canción le había pasado como  a la casa: que no se había puesto el maquillaje.

Muchas gracias a José Luis Climent García-Cid por su ayuda.